Las contingencias presupuestarias y la austeridad aplicada por el Gobierno para reequilibrar nuestras cuentas no son obstáculos para seguir trabajando y cumpliendo objetivos. El compromiso del gobierno con la I+D+i sigue vigente y gracias a ello en España hemos conseguido triplicar desde 2004 la dotación de recursos alcanzando ya el 1,35% del PIB. Avanzamos en el diseño de una estructura del sistema de I+D+i donde la i pequeña, la de la innovación, se propone incrementar su desempeño apoyándose, precisamente, en el amplio y sólido potencial científico que hemos alcanzado. Hasta Gabriel Elorriaga -PP- lo reconocía esta semana en la tribuna del Congreso en su turno de toma de posición frente a la enmienda a la totalidad de la Ley de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación. El camino está trazado en los cinco ejes de la Estrategia Estatal de Innovación, que se verán reforzados con la entrada en vigor de la ley de la Ciencia en la que se establece un modelo de carrera científica que premia la movilidad de los investigadores entre el sector público y privado e incentiva la creación de empresas y la transferencia de conocimiento al tejido productivo.
El camino es el de la integración de ciencia e innovación. Y una de las vías más eficaces es la incorporación de talento innovador a las empresas españolas. Ese es el objetivo del programa "INNCORPORA" para incentivar la contratación de 1000 tecnólogos y gestores, en la línea ya iniciada por el "Torres Quevedo" de apoyo a la contratación de doctores y tecnólogos en empresas. "Inncorpora" es un programa pionero destinado a facilitar la incorporación de talento en nuestras empresas, especialmente en las Pymes. Precisamente ahora, cuando nos preparamos para iniciar nuestra recuperación económica tras una crisis de tintes muy oscuros debido a la baja competitividad de nuestro tejido productivo. Y precisamente ahora, cuando sabemos que España es el quinto país de la Unión Europea en atracción de excelencia investigadora -convocatoria "Starting Grants" del Consejo Europeo de Investigación- lo que demuestra nuestra capacidad para atraer y retener jóvenes científicos de excelencia.
A veces, uno tiene la tentación de pensar que una coyuntura económica adversa, como la que vivimos, puede llevarse por delante los compromisos más firmes que un gobierno haya podido formular ante sus electores. Hoy compruebo que en materia de I+D+i ésto no ha sido así.
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